Con la llegada del buen tiempo empiezan a apetecer los sabores marinos. La sal de la playa y la brisita moviéndonos el pelo. A esa escena le va como anillo al dedo esta receta de camarones fritos, que también puedes prepararla con gambas, el procedimiento es el mismo. ¡Y es muy sencillo!
Para preparar una bandeja que compartir con la mesa vamos a necesitar:
- 300 gr de camarones o gambas arroceras menuditas
- Semol para freír
- Aceite de oliva virgen extra para freír
- Sal fina
Una vez que lo tenemos todo listo, comenzamos.
- Lavamos el marisco crudo con agua en el grifo. Si son gambas de buen tamaño es mejor quitarles las cabezas, pero si son quisquillas o camarones puedes dejarlas.
- Lo pasamos por un escurridor e intentamos quitar todo el líquido posible. A continuación sazonamos ligeramente con la sal.
- Una forma muy rápida de rebozar alimentos es utilizar una bolsa de congelados. La llenamos con la semolina y añadimos, en este caso, las gambas. Agitamos con ganas para que queden bien cubiertas y listo.
- Cuando el aceite esté a 170º, ponemos las gambas a freír el tiempo justo para que se dore el rebozado pero el marisco no quede muy hecho.
Ya podemos disfrutar de este plato perfecto para comidas con amigos. Solo necesitamos una buena noche de verano con los pies en el césped para que tenga el toque perfecto. Y recuerda que al freír con semolina Semol, frituras más crujientes y menos aceitosas. ¡Más sanas!